La más reciente entrega cinematográfica de Superman, dirigida por James Gunn y protagonizada por David Corenswet, debutó con fuerza en taquilla este fin de semana, alcanzando una recaudación global de 217 millones de dólares. De ese total, $122 millones provinieron del mercado estadounidense y canadiense, mientras que el resto corresponde a ingresos internacionales, según reportes de Reuters y Entertainment Weekly.
El filme se posiciona como el mejor estreno global para una producción dedicada exclusivamente al superhéroe de DC Comics, superando los 116 millones de dólares que obtuvo Man of Steel (2013). También se coloca entre los tres lanzamientos más exitosos del año en Estados Unidos, junto a Minecraft Movie y Lilo & Stitch, según datos publicados por Yahoo! Entertainment.
Con un presupuesto estimado de 225 millones de dólares y costos de mercadeo que podrían elevar el gasto total a 400 millones, el filme necesitará superar los 700 millones globales para alcanzar su punto de equilibrio financiero. El comportamiento sostenido en taquilla durante las próximas semanas será determinante, particularmente en mercados internacionales, donde el debut fue ligeramente inferior a las expectativas, de acuerdo con Reuters.
La recepción crítica ha sido en general favorable. La película cuenta con un 82 % de aprobación en Rotten Tomatoes, y críticos han destacado la actuación de Corenswet como una interpretación sólida y humana del personaje. Algunos especialistas también resaltaron el enfoque más luminoso y esperanzador que James Gunn imprimió al relato, aunque ciertos sectores del público señalaron que el tono puede resultar superficial en comparación con versiones anteriores.
Gunn ha explicado que esta versión de Superman está construida alrededor de temas como la bondad, la compasión y la experiencia inmigrante del personaje. Estas decisiones creativas han generado cierto debate público, especialmente entre grupos conservadores, como documentó People en su cobertura del estreno.
La película inaugura la nueva etapa del universo cinematográfico de DC, denominada “Dioses y Monstruos”, bajo el liderazgo creativo de Gunn y Peter Safran. Se trata de un relanzamiento estratégico de la franquicia, que busca ampliar su atractivo comercial tras una década de resultados mixtos en la taquilla y la crítica.