Casi todos los días, a través de su red Truth Social, en el Salón Oval de la Casa Blanca, en entrevistas o en el Air Force One, Donald Trump hace declaraciones insólitas y exageradas, pero lo de este martes al decir que le gustaría “ser papa”, aunque hubiera estado bromeando, parece estar fuera de cualquier norma.
Durante una conversación con la prensa en la Casa Blanca antes de partir hacia a un acto político conmemorativo en Michigan por sus primeros 100 días en el cargo, a Trump, quien no es católico, le preguntaron quién le gustaría ver como nuevo pontífice y contestó: “¿Como papa? A mi me gustaría ser papa, sería mi primera opción”.
Un senador republicano apoya a Trump como papa
La declaración generó repercusiones inmediatas en el ámbito político.
El senador republicano Lindsey Graham reaccionó con una publicación en la red social X, en la que expresó: “Este sería verdaderamente un candidato sorpresa, pero pediría al cónclave y a los fieles católicos que mantuvieran la mente abierta ante esta posibilidad. ¡La combinación primer presidente-papa tiene muchas ventajas! Atentos al humo blanco... ¡Trump MMXXVIII!”.
No queda claro si Graham, un senador conservador y miembro de una iglesia Bautista en Carolina del Sur, estaba también bromeando.
Trump menciona a un cardinal de Nueva York
Luego de decir que le gustaría ser papa, Trump aclaró que no tiene una preferencia clara sobre quién debería liderar la iglesia Católica luego del próximo cónclave. De todas maneras, destacó la figura del cardenal Timothy Dolan, actual arzobispo de Nueva York, al decir que “debo decir que tenemos un cardenal que resulta ser de un lugar llamado Nueva York, que es muy bueno. Así que ya veremos qué pasa”.
Aunque Dolan tiene 75 años y por lo tanto cumple las condiciones para ser “papable” no está entre los principales candidato para el cónclave que comenzará el próximo 7 de mayo en la Capilla Sixtina del Vaticano.
De acuerdo a la prensa especializada, los principales candidatos son el italiano Pietro Parolin, el filipino Luis Antonio Tagle y el guineano Robert Sarah.