Con el objetivo de regularizar inmigrantes indocumentadas en Estados Unidos, regularizar inmigrantes indocumentadas, dos latinos decidieron presentar la Ley de la Dignidad en el Congreso en Washington.
En conferencia de prensa, la congresista republicana María Elvira Salazar y la demócrata Verónica Escobar dieron a conocer, el martes pasado, el nuevo proyecto de reforma migratoria.
Explicaron que incluye diversos medios en virtud de lograr la regularización de al menos 11 millones de individuos que actualmente se encuentran indocumentados en el país.
Aporte de la Ley de la Dignidad
Manifestó que resulta un gran esfuerzo para la modificación del aspecto migratorio en la nación; Salazar, de origen cubano y representante del sur de Florida, alegó que es normativa bipartidista.
La Ley de la Dignidad aportará. “La medida ofrecerá a los inmigrantes que ya están en Estados Unidos la posibilidad de convertirse en ciudadanos, al tiempo que aumentará el gasto federal en seguridad fronteriza”.
Detalló que “la legislación está copatrocinada por la representante demócrata por Texas, Verónica Escobar y que es un esfuerzo por revisar la forma en que se trata a los inmigrantes cuando llegan” a la región.
Aclaró: “Un demócrata (y) un republicano han decidido trabajar en el asunto que más divide a este país: La inmigración”, enfatizó.
Consideraciones
“La propuesta contempla dos vertientes conocidas como un programa de dignidad de siete años y un programa opcional de redención de cinco años, precisó la congresista.
Con la idea, “se abre un período de cinco años para que las personas que hayan vivido por cinco años de manera irregular en Estados Unidos y que no tengan antecedentes penales podrán entrar a un programa que les ofrece permisos de trabajo y de viaje por siete años”.
La legisladora federal continúo brindando información al respecto. “En ese período los migrantes deberán pagar una suma de $5 mil en restitución al gobierno. Esos fondos se usarán para asegurar la frontera y para compensar a los ciudadanos estadounidenses que consideren que han sido reemplazados en sus puestos de trabajo por migrantes indocumentados”, aclaró.