De Ecuador, Caro Rivera Plaza se instaló en Estados Unidos, Los Ángeles específicamente, con la finalidad de obtener más ingresos, brindar calidad de vida a su hija y consolidar el ‘sueño americano’.
En su país natal, la emprendedora ejercía como repostera, pastelera en general: su pasión más grande siempre ha sido trabajar con las manos y cautivar el paladar de las personas.
No hizo falta laborar en otras áreas, “en marzo de 2020 comencé a hacer bocaditos para mis amigos y creé la marca Raymi Flavors. Raymi es una palabra que viene del lenguaje ancestral ecuatoriano, que quiere decir Fiesta. Así que Raymi Flavors, significa Fiesta de Sabores”, esclareció a La Opinión.
Mini chef motiva a su mamá
A la mujer talentosa le motivó su retoño María Paz cuando residían en la nación ubicada en la región noroccidental de América del Sur. Ella representa el símbolo de la inspiración en el universo de la repostería.
“Ella a los seis años tuvo la idea de crear un emprendimiento de cupcakes, a la que llamamos Paz de Sal y Dulce. Imagínense, ahora tiene 18 años y el negocio cumplió 13 años”.
“También representó a Ecuador en un concurso de Nickelodeon junto a la chef Lorena García, y hay un capítulo de Food Hunters donde aparece ella”.
A fin de colaborarle, logró certificarse como chocolatera y pastelera; hizo varios cursos profesionales. “Mi casa en Ecuador se volvió una casa de chocolate. Toda la familia se metió a ayudar porque teníamos pedidos muy grandes de cupcakes”, explicó.
Fiesta con bocaditos
“Mis bocaditos son preparados de acuerdo con el tema del evento. Son únicos. No los van a encontrar en otra parte”, aclaró y agregó: “Por ejemplo, tenemos shots de pastel de tres leches, de cheese cake, queso y piña, tartaletas de fresa, mousse de amaretto”.
Respaldó su calidad y compromiso. “Los bocaditos que yo ofrezco son de alta repostería; hemos crecido poco a poco, con las buenas referencias que nuestros clientes han pasado de boca en boca, y promoviéndonos en las redes sociales. Todas las fotos que ven en Instagram y Facebook son de eventos reales”, relató.
La licenciada en comunicación, experta en marketing, se mueve por el arte culinario. “Cuando creo los bocaditos es como si me transportara a un lugar feliz, me encantan que queden perfectos, el color y los detalles. Siempre les doy a los clientes más de lo que esperan. No solo entrego los bocaditos, sino que armo las mesas de dulce para las fiestas, y las dejo decoradas, la gente se queda impactada cuando las ve”.