El FC Barcelona no la está pasando nada bien en la actual temporada.
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El arranque del año futbolístico trajo muchas dudas; de hecho, previo al inicio de la competición, Lionel Messi quiso abandonar la institución.
Barcelona en crisis financiera
Su argumento principal fue el desastre que tenía la directiva, al no contratar figuras de peso, así como la poca continuidad de los estrategas que habían pasado por el club.
A unos meses de todo, el panorama no ha cambiado. El equipo no ha funcionado en el campo y en el escritorio la situación se ve compleja.
Y es que, en lo económico el cuadro blaugrana está entrando en números rojos, por lo que pedirán a los jugadores que acepten una reducción salarial a inicios del próximo año.
“Queremos seguir reduciendo gastos a corto plazo, y la medida más necesaria es la mesa de negociación salarial. Esperamos cerrar un acuerdo con los jugadores y el personal no deportivo del club.
“No queremos quitarle dinero a nadie, queremos acomodar lo que se debe a los momentos en los que se pueda pagar con más comodidad”, comentó Carles Tusquets, presidente de la comisión gestora del equipo.
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De hecho, el directivo dijo estar arrepentido por no haber vendido a Messi cuando se quería marchar, pues eso hubiera recortado gastos que hoy los tienen mal parados.
“Económicamente, yo habría vendido a Messi. Habría sido lo más deseable, y más teniendo en cuenta los límites salariales que establece La Liga.
“Tener el Camp Nou cerrado supone dejar de ingresar 320 millones menos. La situación es horrible, pésima, pero cuando se reabra mejorará de golpe, así que hay esperanza”, recalcó.
La renuncia de Josep Maria Bartomeu simbolizó una desestabilización en todos sentidos; de hecho, se espera que este mes haya elecciones para tener un nuevo presidente lo antes posible.
No comprarán a Neymar
La crisis monetería ha llevado al Barcelona a no pensar en hacer gastos exagerados, por lo que el regreso de Neymar a la entidad culé luce complicado.
“Si viene gratis, se podría plantear. Si no, no hay dinero para pagar. A no ser que un nuevo presidente venga con un milagro en la mano”, puntualizó.
