La etapa de Johan Cruyff como director técnico del Barcelona tuvo momentos muy importantes y miles de anécdotas que se pueden contar.
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Sin embargo, hay una en particular que protagonizó el astro brasileño Romario.
La curiosa anécdota de Romario con el Barcelona
El delantero siempre fue un jugador diferente, tenía creencias diferentes a las que su talento mostraba en la cancha.
De hecho, a Romario no le gustaba entrenar, pues creía que era una perdida de tiempo; incluso, su alimentación no tenía un lineamiento como el de todos sus compañeros.
“No me merecí todo lo que logré. Nunca me comporté como un profesional, nunca fui un atleta. Era sólo un jugador de fútbol. No dormía nunca cómo debía, no comía como un deportista, siempre llegaba tarde, no me entrenaba a fondo todos los días, no respetaba los descansos, pero metí mil dos goles”, relató hace algunos años.
Previo a un partido, ante el Osasuna en La Liga, el atacante carioca se acercó al timonel holandés y le pidió dejarlo ir al carnaval de Brasil.
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La respuesta de Johan no fue negativa; al contrario, retó a su jugador, le pidió anotar dos goles y si lo hacía lo dejaría ir sin problema alguno.
“Una vez, Romario me preguntó si podía perderse dos días de entrenamiento para poder ir a Brasil al carnaval de Río de Janeiro. Respondí: ‘Si marcas dos goles mañana, te daré dos días más de fiesta”, comentó Cruyff.
La sorpresa del estratega del Barcelona fue mayúscula, ya que Romario marcó doblete antes del minuto 20 de partido.
El brasileño se acercó a la banda, pidió su cambió, argumentando que su avión salía en menos de una hora.
El timonel blaugrana no tuvo de otra, sacó al brasileño del campo y le otorgó el permiso, mientras su equipo sacó la victoria en el campo.
Los días pasaron y Romario no regresó a tiempo a la concentración; sin embargo, el atacante argumentó que Cruyff nunca le especificó cuántos días le había regalado.
“El mister me dio permiso para irme de vacaciones a Brasil, pero no me dijo cuándo debía volver”, comentó.
