El Tribunal del distrito Norte de California rechazó este martes en la tarde la solicitud del gobernador del estado, Gavin Newsom, para impedir el despliegue de Marines y la Guardia Nacional en Los Ángeles por parte de la Administración de Donald Trump, al que ha acusado de estar “poniendo al Ejército estadounidense en contra de los ciudadanos” en el marco de las protestas contra las políticas migratorias del presidente de Estados Unidos.
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En su lugar, el juez federal Charles Breyer decidió programar una audiencia para el jueves a las 1.30 pm (hora local), según un documento judicial recogido por la cadena CNN, con el objeto de recabar los argumentos de ambas partes sobre la petición californiana de restringir temporalmente la movilización de militares en la mencionada localidad.
El Departamento de Justicia, por su parte, calificó la solicitud de California como carente de “fundamento jurídico” en un breve escrito presentado ante el juzgado, argumentando que, de concederse, pondría “en peligro la seguridad del personal del Departamento de Seguridad Nacional e interferiría en la capacidad del Gobierno federal para llevar a cabo sus operaciones”.
A su vez, el fiscal general de California, Rob Bonta, anunció que presentará una denuncia contra Trump y su secretario de Defensa, Pete Hegseth, por el despliegue “ilegal” e “incendiario” de las fuerzas de seguridad en Los Ángeles, explicando que el envío de tropas supone una violación de la Constitución.
Trump dice que California fue “invadida”
La tarde de este martes, en un evento en el Fort Bragg, de Carolina del Norte, una las bases militares más grandes del mundo, Donald Trump dijo que Los Ángeles está siendo “invadida” por un “enemigo extranjero”.
“Lo que están presenciando en California es un ataque total a la paz, al orden público y a la soberanía nacional, perpetrado por alborotadores que portan banderas extranjeras con el objetivo de continuar una invasión extranjera de nuestro país. No vamos a permitir que eso suceda”, comentó Trump.
El presidente de Estados Unidos criticó a los manifestantes, a los que ha calificado de “animales”
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Esta mañana Trump también reconoció que baraja invocar la Ley de Insurrección en el caso de que la situación escale en la ciudad californiana y acusó a los manifestantes de recibir pagos por protestar contra las redadas y detenciones del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE).
La Ley de Insurrección establece el mecanismo a seguir para poder activar el uso de esta fuerza en momentos de “rebelión”.
