La madre orca que se hizo viral por llevar el cadáver de su cría fallecida por más de dos semanas, acaba de perder a su segundo bebé, informaron los científicos que están a su cargo.
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La triste y lamentable historia se repite en J35, como ha sido identificada la mamá orca. La primera cría que perdió fue en 2018 y antes de Navidad los expertos contaron que había sido vista con una segunda cría hembra, que llamaron J61. Pero la tristeza invade nuevamente a J35.
Segunda cría que muere para la madre orca
Los científicos dieron la noticia después observan que la manada hizo sonar las alarmas pocos días después del descubrimiento, diciendo que estaban “preocupados” por la salud de la cría basándose en el “comportamiento tanto de J35 como de J61″.
“Los primeros años de vida siempre son peligrosos para los nuevos ballenatos, con una tasa de mortalidad muy alta durante el primer año”, publicó el Centro de Investigación de Ballenas en Facebook apenas cuatro días después del descubrimiento. Pero no todas las esperanzas están perdidas.
“El equipo también descubrió que había nacido otra cría en el grupo de ballenas en peligro crítico de extinción. No se ha confirmado ni su madre ni su género. La manada, que recorre el vasto Océano Pacífico entre el estado de Washington y Columbia Británica, enfrenta numerosas amenazas, incluido el ruido de los barcos y las perturbaciones que dificultan la caza, la contaminación de los alimentos y la falta de fuentes de alimentos”, añade NY Post en su web.
Fotografías con su segundo ballenato
Un fotógrafo y experto de la naturaleza marina fue quien fotografió el tierno momento: la diminuta aleta dorsal del recién nacido asomándose.
“Mi primera reacción al ver a la cría fue de total conmoción. Estaba mirando mis fotos para ver quiénes eran las ballenas que pasaban cerca del lado de babor del ferry en el que estaba y noté que una de las fotos tenía una aleta dorsal mucho más pequeña”, dijo el fotógrafo.
“Mientras me desplazaba por la serie, me di cuenta de que era una cría muy pequeña, mucho más pequeña que cualquiera de las crías conocidas del grupo. Basándome en el tamaño y el color de la cría, me di cuenta de que era una cría nueva y que viajaba con J35, mi ballenato, la ballena que inició mi obsesión”, dijo en su perfil de Facebook.