Reconocido como “El señor Garabato”, Sam Cox ha causado furor porque decidió convertir su mansión neogeorgiana en un sitio sagrado y nada cercano a la realidad de cualquier hogar.
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Con las obras llamativas que le permitieron consagrarse a nivel internacional, diseñó todas las paredes de la casa que cuenta con seis habitaciones, ¡están cubiertas de pie a cabeza!
Conforme a sus impresionantes, característicos, elaboró dibujos en blanco y negro; pasó los últimos dos años garabateando cada centímetro de la misión que hoy día es famosa y todo el mundo desea visitar.
¿Cómo «el señor Garabato» pintó la casa?
Explicó: “Utilicé 900 litros de pintura blanca, 401 botes de pintura negra en spray (para el exterior), 286 botes de pintura negra para dibujar (para el interior) y 2296 plumillas (solo usé cuatro bolígrafos de diferentes tamaños, pero eran recargables y las puntas eran reemplazables)”.
En cuanto a la animación, “fue creada íntegramente por mí y consta de 1857 fotografías, minuciosamente tomadas entre septiembre de 2020 y septiembre de 2022″, detalló.
“Toda la casa es real, todo está garabateado, todos los garabatos fueron hechos a mano para la animación, no es CGI”, comunicó el artista, acotó New York Post.
¡Emoción a millón!
En una publicación realizada el pasado 2 de octubre, expresó su sentir sobre lograr tal acción histórica. “Tan feliz y emocionado de haber finalmente hecho garabatos en mi casa”, escribió.
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Justo en la misma red de la camarita, empezó a dar a conocer sus creaciones en el año 2013; Cox reveló que todo lo ha garabateado desde temprana edad, a partir de su uso de razón.
Nació en la ciudad de Kent, en Reino Unido, 1994. Su historia inició llenando los muebles de sus padres y libros de texto.
En el porta Totenart se lee: “A lo largo de los años, el artista ha trabajado para marcas como MTV o Adidas, siempre con su estilo tan especial. Además, su trabajo se caracteriza por su particular energía: sus obras son escenas complejas, llenas de símbolos y pequeños personajes.Todo, realizado por un artista que nos invita a que nos tomemos la vida un poco menos en serio!”.