La empresa Fígaro apostó y ganó en Estados Unidos: posee 13 sucursales en todo el territorio nacional. Bajo el liderazgo de Jhon Isaza y su pareja Andrea Gómez la franquicia de barberías, proveniente de Colombia, cuenta con equipo que homenajea a diario al sexo femenino.
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“Somos la cadena de barberías más grande y mejor posicionada de Colombia con 28 sedes en operación y 13 sedes en operación en Estados Unidos. Tenemos como propósito ser la primera multinacional del cuidado personal con corazón colombiano”, dijeron en entrevista con El Espectador.
Isaza, administrador con estudios Complementarios en Derecho y Relaciones Internacionales, explicó que tanto en Estados Unidos como en Colombia el equipo de trabajo está liderado por mujeres: féminas cabeza de familia que colaboran en diversas áreas, incluyendo administración. Esto es parte de su labor social.
Fígaro, sinónimo de motivación
Para crear Fígaro en Estados Unidos no solo hizo falta un capital, se necesitó las ganas de abrirse puertas sin tener miedo al fracaso. “Gracias a nuestra organización y planeación no fracasé, pero casi tiro la toalla en pandemia”.
Se encuentran, actualmente, “vendiendo franquicias en Colombia y Estados Unidos, y recibimos inversiones de fondeo”, contó. En la misma medida, confirmó que su negocio es escalable en esta etapa en Estados Unidos y Colombia.
Próximamente, aspira posicionarse en otras naciones y estados. El fundador de Fígaro, la empresa colombiana ‘top’ en Estados Unidos, hoy día es sinónimo de motivación para los emprendedores latinos.
Él, igualmente, debió recibir inspiración. “Me Inspiraron muchos emprendedores colombianos, como los dueños de Crepes and wafles; Mauricio Hoyos, Alexander Torrenegra, Ricardo Leiva y el dueño de Frisby”.
Impacto en generaciones nuevas
Consideró que la labor que han realizado desde su inicios, “que nació y se materializó el 14 abril 2016″, impacta en generaciones actuales. “Especialmente, por la capacidad de globalizar la marca y el ayudar a tantos emprendedores en tantos lugares del mundo. Realmente, las franquicias son de los modelos más amables para hacer comercio”, alegó.
De palabras a hechos. “Trabajamos en una visión estratégica, con un toque de creatividad e innovación en productos ausentes del mercado, muy amparados en los principios ganar- ganar para los grupos de interés del proyecto”, sostuvo sobre la manera cómo lograron hacer realidad sus ideas.
Con las barberías Fígaro, han ayudado a generar ofertas laborales. Una “generación de empleo de calidad, formalización e industrialización de un oficio, expansión del legado internacional de mercado, posibilidades de internacionalización de colaboradores, emprendedores e inversionistas, apertura de mercados. En este momento, hemos apoyado a 32 emprendedores a sacar adelante sus proyectos”, puntualizó Jhon Isaza, creador de Fígaro que emerge cada día gracias al respaldo de su esposa y gerente financiera, además del resto de los integrantes del equipo.
