Los planes de Joe Biden para dejar un gran legado y encumbrar su administración se encuentran detenidos, aunque desafortunadamente para su causa son dos senadores de su propio partido los que están poniendo las principales trabas en estos momentos.

Así, los proyectos millonarios que el mandatario espera que sen aprobados en el Congreso son mantenidos en jaque por los senadores Joe Manchin y Kyrsten Sinema.

Estos dos senadores se han convertido en el voto decisivo para la agenda de inversión social del presidente Biden.

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Manchin y Sinema quieren que sea menor el gasto

Manchin, de Virginia Occidental, y Sinema, de Arizona, representan al sector centrista, más conservador del Partido Demócrata.

Ellos dos han mostrado públicamente su oposición e intención de maquillar los grandes planes de gasto del jefe del Ejecutivo: el plan de infraestructura de 1.2 billones de dólares y el de inversión social de 3.5 billones de billetes verdes.

De hecho, Manchin y Sinema, quienes ayudaron a que el proyecto de ley de infraestructura ganara apoyo bipartidista, han detenido el avance del plan de inversión social alegando que es demasiado ambicioso.

Es más, el senador de Virginia Occidental realizó una protesta el pasado 31 de septiembre para reducirlo a 1.5 billones de dólares, una idea que cayó como balde de agua fría para los demócratas progresistas.

Cambio de estrategia

La estrategia en la Cámara de Representantes era proceder con el plan de obras públicas, que cuenta con el apoyo bipartidista, mientras se continuaba negociando con el otro gran paquete que Washington ha descrito como “infraestructura humana”, el cual incluye ampliar el acceso a la atención de la salud, impulsar los programas de educación y luchar contra el cambio climático.

Debido a los enfrentamientos con Sinema y Manchin, el grupo de representantes progresistas sostiene que no votará a favor hasta que el paquete social cuente con garantías para convertirse en realidad.

En este marco, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, pospuso el voto que había sido convocado para el 31 de septiembre, cuando estuvo claro que arriesgaba a una humillante derrota propinada por sus propios compañeros demócratas.

¿Quiénes son Manchin y Sinema?

Joe Manchin llegó al Congreso en 2010, representando a Virginia Occidental, un estado con 93 por ciento de población blanca, en donde el sector de energía y minería del carbón son los dominantes de la economía.

Él posee millones de dólares en acciones de una compañía de carbón que le generan medio millón de dólares en dividendos al año.

Hace unos meses, el senador dio señales de la resistencia al plan de inversión social del presidente. Se mostró “muy preocupado” por las disposiciones dentro de la iniciativa de ley que buscan limitar la quema de combustibles fósiles en EU.

“Estoy dispuesto a sentarme y trabajar en ese 1.5 (billones de dólares) y conocer nuestras prioridades”, dijo la semana pasada.

En tanto, Kyrsten Sinema llegó al Senado hace dos años, al convertirse en la primera mujer en arribar a la Cámara Alta por Arizona. Es la primera abiertamente bisexual en el Senado.

Tiene posiciones más liberales en el pasado, que contrastan con su actual centrismo. Al inicio de la década de los años 2000 fue activista del Partido Verde, como legisladora estatal que apoyaba la lucha por los derechos LGBT y se oponía a duras leyes de inmigración en Arizona.

Adoptó una posición más bipartidistas al ser elegida a la Cámara de Representantes en 2012. Según The New York Times, los republicanos la aman por trabajar en estrecha colaboración con ellos.

“La senadora Sinema dijo públicamente más de dos meses atrás, antes de que el Senado pasará el acuerdo bipartidista de infraestructura, que ella no apoyaría el proyecto de 3.5 billones de dólares”, dijo en un comunicado su oficina el cual ella misma compartió en Twitter.