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Ordenan la vacunación a niños mayores de 12 años en Los Angeles para volver a la escuela

La medida fue recibida con algunas críticas por parte de los padres.

Luego de un acalorado debate que puso de nuevo a la vacuna contra el covid-19 es una posición polémica, los funcionarios escolares del condado de Los Ángeles ordenaron el jueves la vacunación para todos los estudiantes de 12 años o más.

Los miembros de la junta escolar votaron unánimemente para ordenar las inyecciones en las próximas semanas a pesar de las airadas objeciones de varios padres que dijeron que estaban preocupados por la seguridad de las vacunas y que tenían derecho a tomar la decisión por sus hijos.

“No veo esto como su elección o como mi elección”, dijo el miembro de la junta Jackie Goldberg. “Veo esto como una necesidad de la comunidad. Eso significa que las personas tienen que hacer cosas con las que no se sienten cómodas, de las que no están seguras, que incluso pueden contener algún riesgo”.

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A pesar de algunas voces en contra de esta drástica decisión, la junta aplaudió después de la votación. El miembro de la junta Scott Schmerelson se vio obligado a abstenerse porque posee acciones en el fabricante de vacunas Pfizer (PFE.N). Luego le dijo a la junta que apoyaba su decisión.

La vacunación para los niños y menores de 16 años aun no está del todo aceptadas por la sociedad

La política de vacunas del distrito escolar de Los Ángeles se aplica a todos los más de 600 mil estudiantes del distrito que tienen 12 años o más, a menos que puedan establecer una exención médica o religiosa. La junta ordenó previamente que todos los empleados fueran vacunados.

El mandato no se aplica a una pequeña minoría de estudiantes en el segundo distrito escolar más grande del país que han optado por quedarse en casa.

Aproximadamente el 73% de los estudiantes del distrito son latinos y los miembros de la junta dijeron que harían esfuerzos para convencer a los padres inmigrantes de la seguridad de la vacuna, y dijeron que muchos desconfiaban del gobierno.

Los tres padres que hablaron en la reunión en contra de las vacunas forzadas hablaron en español y dijeron que deberían ser ellos los que tomen decisiones tan críticas sobre la salud de sus hijos. “¿Podemos demandar al distrito si nuestro hijo tiene efectos secundarios secundarios que son negativos?” un padre que se identificó como Juan preguntó a la junta. Ninguno de los miembros le respondió directamente.

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