Amor, traición y hasta humor. Los remakes o versiones de telenovelas famosas muestran personajes que enamoran y enojan, una y otra vez. La historia se repite con nuevos rostros pero con la misma pasión de la primera ocasión, y vuelve a enganchar al público.
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En México, conocido por superproducciones dramáticas que han traspasado fronteras, existe una larga lista de telenovelas famosas, varias que son versiones que contenidos extranjeros o desempolvados con el tiempo.
Angélica Vale y Jaime Camil protagonizaron La fea más bella, una adaptación de la telenovela más famosa en la pantalla colombiana: Betty, la fea. No pocos volvieron a quedar cautivados por la trama de Leticia Padilla, la joven poco agraciada que poco a poco enamoró al empresario Fernando Mendiola.

Otro de los remakes más famosos en México, catapultó la carrera de Thalía. La humilde «María la del barrio» se trató entonces de un «refrito» de Los ricos también lloran protagonizada en los años 80 por Verónica Castro. ¿Quién puede olvidar a la malvada Soraya Montenegro? El personaje antagónico fue interpretado por Itatí Cantoral, pero décadas atrás por Inés Rodena.

Paola Bracho (Gabriela Spanic) se convirtió en un personaje icónico de la televisión mexicana. La gemela villana de «La Usurpadora», inspirada en la radionovela de Inés Rodena, es tan inolvidable que más de dos décadas después del éxito de la superproducción en comentada en las redes sociales.
Una versión más actualizada lleva por nombre «Fabrica de sueños». La trama igualmente se centra en la malvada gemela aunque ahora con un matiz político pues alude a una familia presidencial. Sandra Echeverría da vida a Paola Montaner de Bracho.
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«Simplemente María» fue protagonizada por Victoria Ruffo, quien dio vida a la humilde joven recién llegad a la ciudad de México donde se enamora perdidamente de «Juan Carlos», interpretado por Manuel Saval. La tragedia está inspirada en la producción argentina del mismo nombre transmitida en los años 70.
Hablar de «Rubí» es hacerlo de una las más inolvidables producciones dramáticas en México. La primera versión llegó a las pantallas en 1968 y fue interpretada por Valentín Pimstein y la fallecida Fanny Cano. La adaptación que muchos recordarán fue protagonizada por Bárbara Mori en 2004, junto a lado de Eduardo Santamarina, Jacqueline Bracamontes y Sebastián Rulli.

Fue tan avasallante el éxito que la actriz recibió una propuesta para engalanar una segunda parte de la historia pero declinó, incluso un par de veces a volver a interpretar a Rubí Pérez Ochoa, cuya historia también tiene una adaptación en el cine.