La hora de la verdad ha llegado. Lewis Hamilton y Max Verstappen disputarán el título de la Fórmula 1 en la última fecha.
El Gran Premio de Abu Dabi será testigo de un capítulo más en la historia del automovilismo.
Y es que, Hamilton estará buscando consolidarse, como el volante más ganador en la historia del serial, ya que de cosechar una victoria sumaría su octavo trofeo, dejando atrás a la leyenda Michael Schumacher.
Sin embargo, Verstappen quiere acabar con el dominio del británico, quien en los últimos años no ha soltado la corona.
A lo largo de la temporada, Max dominó la punta del campeonato, pero la experiencia de Lewis salió a flote en las últimas jornadas, lo que lo llevó a empatar al neerlandés.
El año no ha sido sencillo para los dos pilotos, quienes se han enfrascado en una serie de conatos que tiene más caliente que nunca la batalla por la cima.
El 19 de julio de 2021 comenzó la guerra fría, cuando Hamilton chocó el bólido del Max, en el GP de Gran Bretaña.
El impacto apartó de la pista al holandés, lo que dejó el camino libre para que Lewis se llevara la carrera.
Desde ese momento comenzó una contienda de declaraciones. Incluso, Verstappen aseveró que respeta al británico, pero criticó un poco su vida fuera de las pistas, ya que lo calificó como un tipo excéntrico.
La polémica continuó en el Gran Premio de Brasil, cuando el piloto de Red Bull tocó el alerón trasero del bólido de Lewis, lo que le costó ser multado con más de 60 mil dólares, puesto que el reglamento indica que no se puede manosear un carro ajeno.
Hamilton, el piloto más exitoso de los últimos tiempos, ha manejado a placer psicológicamente el duelo, al grado de sentirse favorito para la última rodada del año.
Incluso, en la última conferencia de prensa, el británico comentó que buscará romper la marca impuesta en el serial, aunque tampoco se presiona por tratar de hacer historia.
La última polémica llegó en la última fecha, cuando Verstappen obligó a Lewis a chocar su auto. Durante el Gran Premio de Arabia Saudita, Max disminuyó la velocidad de su bólido en la vuelta 35, por lo que Hamilton no pudo evitar tocar ligeramente el monoplaza de su rival.
Esto provocó que el alerón del británico se rompiera, lo que provocó una discusión entre escuderías en los pits. Al final, el piloto de Mercedes superó al holandés y se llevó la victoria.