Durante el apogeo del Walkman de Sony a finales de la década de 1980, la empresa matriz del iPhone de Apple de la época se asoció con Tiffany & Co. para crear una versión plateada del reproductor de casetes portátil y personal, en honor al décimo aniversario del absurdamente popular dispositivo de escucha.
PUBLICIDAD
Sólo se fabricaron 250 de estos Walkman especiales, muchos de ellos entregados directamente a algunos de los nombres más importantes de la música.
Hoy en día, mucho después de que la revolucionaria tecnología quedara obsoleta, el coleccionista de Walkman Mark Ip es el orgulloso propietario de no uno, ni dos, sino tres Walkmans de Tiffany, por los que gastó un total de unos 10.000 dólares para sacarlos de un mercado de coleccionistas sorprendentemente sólido, informó The Guardian.
Coleccionista
Ip, de 60 años, es uno de los coleccionistas de Walkman de mayor perfil; busca los modelos más impecables que pueda encontrar, que muestra en su popular página de Instagram, @boxedwalkman.
“Tengo un poco de TOC”, le dijo Ip a un periodista del Guardian. “Porque no estoy satisfecho con sólo unidades individuales. Quiero embalaje, manuales de usuario, auriculares originales”.
“Como todo coleccionista, buscas la perfección”, dijo. “Lo que es perfecto es una caja nueva, nunca tocada, sin rayones, sin polvo. Es casi imposible, pero haré todo lo posible para esperar pacientemente”.
Colección de Walkman
Tan perfectos son muchos de los especímenes de su colección que Ip decidió exhibirlos para que el público los apreciara, hace unos años.
PUBLICIDAD
“Esta es una de mis misiones en la colección de Walkman”, dijo, para exponer a los jóvenes a algo que significó tanto para la generación mayor. Muchos de los asistentes más jóvenes estaban “viendo un reproductor de casetes por primera vez”, dijo. “La mayoría sentía verdadera curiosidad. Estaban intrigados por su mecánica”.
Para el coleccionista radicado en Hong Kong, el negocio es profundamente personal: mantiene alrededor de 20 dispositivos afuera en todo momento, sólo para jugar; La obsesión de Ip se remonta a su juventud, dijo, cuando no podía permitirse un walkman propio.
“Cuando estaba en la secundaria, un compañero tenía el primer modelo, el TPS-L2 . El estéreo sonaba muy bien. Y era portátil”, recordó.
No fue hasta años más tarde, cuando los dispositivos ya no eran necesarios y estaban casi olvidados, que Ip comenzó a construir su vasto tesoro de reproductores de cintas: alrededor de 1.000, estima, pero no se atreve a dejar ninguno de ellos., por ahora.
No es así Stephen Ho, un usuario activo de eBay que vende Walkmans bien cuidados por hasta 3.780 dólares, aunque admite que la mayor parte de lo que vende cuesta mucho menos. Trata con todas las edades, dice, desde los miembros de la Generación X como él, que crecieron apegados a sus jugadores, hasta jóvenes con gusto por lo viejo.
Lea también: Elon Musk: el primer paciente de Neuralink “puede mover un mouse por la pantalla con el pensamiento”
