“South Park” es ampliamente conocida por satirizar a políticos y a la sociedad de Estados Unidos a lo largo de todo el espectro ideológico, pero el estreno de la temporada 27 este miércoles, con la representación de Donald Trump en una serie de escenas provocadoras, incluyendo una completamente desnudo, fue un paso más allá de lo habitual, generando una airada respuesta de la Casa Blanca.
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La crítica también incluyó a Paramount por el reciente acuerdo para pagarle $16 millones al presidente de Estados Unidos con tal de evitar una demanda por una nota en “60 Minutes” de CBS y por la eliminación del late show de Stephen Colbert.
Lo curioso es que ese día miércoles los creadores de “South Park”, Matt Stone y Trey Parker, llegaron a un acuerdo con Paramount para producir 50 nuevos episodios en los próximos cinco años para Comedy Central, un contrato valorado en 1.500 millones de dólares, según diversas fuentes.
¿Cómo fue el polémico episodio de “South Park”?
En una de las escenas más controversiales del episodio, Trump retratado en su habitación de la Casa Blanca desnudándose y metiéndose a la cama con Satanás. Este último lo rechaza y hace alusión al caso Jeffrey Epstein, preguntándole si realmente aparece en la lista de contactos del criminal sexual. Satanás le dice: “¿Estás en la lista o no? Es raro que cada vez que surge el tema, simplemente le dices a todos que se relajen”.
Luego Trump responde a una protesta en la escuela primaria de South Park, donde los habitantes cuestionan la presencia de Jesús en el auto y el presidente responde demandando al pueblo por 5.000 millones de dólares. La escena se satiriza aún más cuando las protestas son cubiertas por el programa “60 Minutes”, cuyos presentadores se muestran visiblemente preocupados por posibles represalias legales del presidente, haciendo referencia a conflictos previos entre Trump y CBS.
Ahí aparece Jesús y aunque inicialmente parece respaldar a los protestantes, su verdadera intención es advertirles sobre las consecuencias de su acto. “South Park podría ser cancelado si no detienen la protesta”, les dice y luego les recuerda: “¿Vieron lo que le pasó a CBS? Bueno, adivinen quién es dueño de CBS: Paramount. ¿De verdad quieren terminar como Colbert?”.
Ante esta amenaza simbólica, los habitantes del pueblo optan por ceder ante el presidente y llegar a un acuerdo, que incluye producir una serie de mensajes a favor de Trump.
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Así, los momentos finales del episodio consisten en un montaje propagandístico donde aparece un video generado por inteligencia artificial de Trump caminando desorientado por el desierto, mientras se quita toda la ropa. Una voz en off anuncia: “Cuando las cosas se ponen difíciles, ¿quién nos librará de la tentación? Donald J. Trump. No importa cuán caliente esté todo, él no tiene miedo de luchar por Estados Unidos”. El video culmina con una escena del mandatario quitándose sus pantalones, seguido del eslogan: “Trump. Su pene es diminuto, pero su amor por nosotros es inmenso”.
La Casa Blanca responde con dureza
En la consulta de algunos medios, la Casa Blanca emitió un comunicado crítico. La subsecretaria de prensa, Taylor Rogers, dijo que “la hipocresía de la izquierda verdaderamente no tiene límites, durante años han atacado a ‘South Park’ por su contenido ‘ofensivo’, pero de repente están elogiando el programa”, según Variety.
Rogers agregó un comentario al estilo de Trump y dijo que “este programa no ha sido relevante en más de 20 años y se mantiene apenas con ideas poco inspiradas en un intento desesperado por atención”.
Las polémicas que complican a Paramount
La semana pasada, en su particular y aplaudido estilo sarcástico, Stephen Colbert criticó a Paramount por llegar a un acuerdo de $16 millones con Trump a cambio de que el presidente retire una demanda contra CBS por una nota de Kamala Harris durante la campaña presidencial.
Colbert calificó el acuerdo como “un gran soborno enorme”, ya que el objetivo sería complacer a la administración Trump para que apruebe la venta de Paramount a Skydance Media.
Tres días después, CBS tomó la sorpresiva y cuestionada decisión de cancelar el exitoso programa “The Late Show” de Stephen Colbert, medida que fue aplaudida por Trump.