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El 6 de enero será una fecha que Estados Unidos no olvidará en mucho tiempo, pues quedó manchada la democracia de un país que se jacta de la fortaleza de ésta.
Cuando Joe Biden se preparaba para ser ratificado por el Congreso como nuevo presidente de la nación norteamericana, cientos de seguidores de Donald Trump irrumpieron violentamente en el Capitolio.
Las consecuencias de esos actos fueron fatales. Seis personas fallecieron en el incidente, entre ellos un policía. Además, otros dos uniformados se quitaron la vida después de los violentos hechos y otros más continúan con secuelas psicológicas.
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Ahora, un hombre de Florida que participó en el asalto a una de las sedes de la democracia estadounidense, que contaba con una bandera de la campaña del empresario y magnate, fue sentenciado a ocho meses tras las rejas.
La intención de los fanáticos de Trump era impedir que el Colegio Electoral certificara el triunfo del líder de los demócratas en las elecciones de noviembre del año pasado.
Paul Allard Hodgkins, primer sentenciado por ataques al Capitolio
Se trata de Paul Allard Hodgkins, quien recibió el primer castigo dictado por un delito grave cometido durante la irrupción al Capitolio. Este acto podría ayudar a determinar la severidad de otras sentencias en cientos de casos que hasta ahora se encuentran pendientes.
Al mencionar la sentencia contra Hodgkins, el juez federal de distrito, Randolph Moss, sostuvo que el hombre de 38 años había jugado un papel en uno de los más graves episodios de Estados Unidos, aunque su rol no fue tan importante como otros implicados.
“Eso no fue, por ningún tramo de la imaginación, una protesta. Fue un asalto a la democracia. Dejó una mancha que permanecerá en nosotros… en el país durante los próximos años”, dijo el magistrado.
Más de medio millar de personas han sido acusadas hasta ahora por su participación en el ataque; muchas, como Hodgkins fueron señaladas por delitos graves, pero no fueron imputadas, como otras, por participar en conspiraciones más importantes.
«Si permitimos que la gente asalte el Capitolio de los Estados Unidos, ¿qué estamos haciendo para preservar nuestra democracia?», cuestionó Moss.
No agredió ni dañó propiedad del gobierno
Concluyó que no merecía una sentencia de los 18 meses que habían solicitado los fiscales, en gran parte, porque no agredió a nadie, no dañó la propiedad del gobierno y no es uno de los atacantes principales.
Mientras tanto, Hodgkins se disculpó ante la corte, al asegurar que se siente arrepentido y avergonzado por sus actos.
En un texto que llevaba preparado, describió que estuvo atrapado en la euforia de la multitud, mientras caminaba por la avenida más famosas de Washington.
«Si tuviera alguna idea de que la protesta se intensificaría como lo hizo, nunca me habría aventurado más allá de la acera de la avenida Pennsylvania», le dijo al juez. «Esta fue una decisión tonta de mi parte», continuó.
