Con menos de un mes en el cargo, Joe Biden continúa realizando movimientos para echar atrás las políticas y decisiones del expresidente Donald Trump.
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Luego de reintegrar a Estados Unidos al Acuerdo de París y a la Organización Mundial de la Salud, ahora fue el turno del Consejo de los Derechos Humanos de la ONU, al que el empresario decidió abandonar en 2018, al acusar hipocresía.
La intención, en un principio es comprometerse con el organismo en calidad de observador, así lo dio a conocer Antony Blinken, secretario de Estado del país norteamericano.
“El Consejo es defectuoso y necesita reformas, pero salirse no lo arreglará. La mejor manera de mejorarlo para que alcance su potencial es a través del robusto liderazgo de Estados Unidos. Bajo la Presidencia Biden, nos estamos reinvolucrando, listos para liderar”, indicó en su cuenta oficial de Twitter.
Hace tres años, la administración que dirigía Donald Trump se alejó del órgano internacional, al criticar un presunto sesgo en temas relativos a Israel y por supuestos servicios de plataformas a naciones como China, Venezuela y Cuba.
“No dudamos que su creación fue con buena fe, pero tenemos que ser honestos: el Consejo de Derechos Humanos de la ONU es un pobre defensor de los derechos humanos”, dijo el exsecretario de Estado, Mike Pompeo, entonces.
Papel de observador en este año
Por el momento y hasta finales de 2021, Estados Unidos sólo tendrá un papel de observador sin derecho a voto, pero los funcionarios del país esperan una de las tres bancadas de miembro pleno (ocupadas ahora por Austria, Dinamarca e Italia), que corresponden al “Grupo de Europa Occidental y otros estados”, y que estarán sujetas a elecciones en este año.
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“Cuando funciona bien, el Consejo de Derechos Humanos pone el foco sobre los países con los peores historiales de derechos humanos, y puede servir de faro para quienes luchan contra la injusticia y la tiranía. Por eso Estados Unidos ha vuelto a la mesa”, indicó Blinken en Twitter.
“Cuando trabajamos estrechamente con nuestros aliados y amigos, podemos pedir cuentas a los países con los peores historiales de derechos humanos. El liderazgo de Estados Unidos es importante”, añadió.
Biden también ha dejado entrever su intención de regresar a la UNESCO y al acuerdo con Irán.
