Lo que sucedió en el Capitolio el pasado 6 de enero pasará a la historia de Estados Unidos como una de las fechas que mancharon su vida política.
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La irrupción de decenas de seguidores del presidente Donald Trump a una de las sedes más importantes de la democracia del país norteamericano, además de ser condenada y criticada por líderes políticos nacionales e internacionales, desembocó con la muerte de cinco personas.
Pero en medio de los disturbios que pusieron en el ojo del huracán la situación actual de Estados Unidos, se volvió viral hasta estos días un mexicano, que, sin importar los peligrosos a los que se enfrentaba, decidió continuar con su trabajo.
Don Efra, el poblano que seguía vendiendo hot dogs en el Capitolio
Se trata de Efraín González, o Don Efra como lo llaman sus amigos y seres cercanos. El hombre de 53 años, nativo del estado de Puebla, causó furor en las redes sociales, luego de que siguiera promoviendo sus hot dogs, en su carrito.
Las imágenes resultan surrealistas. Mientras decenas de personas pro Trump optaron por entrar al Capitolio, el mexicano decidió seguir vendiendo sus alimentos. En los videos se puede apreciar el odio, el asalto a la democracia y la indisciplina, que se comparan con la necesidad y las ganas de trabajar.
En una transmisión del canal local FOX 11, entre los manifestantes aparece el vendedor ambulante, con una mascarilla facial blanca y una gorra de los Rams, conduciendo su carrito frente a City Hall.
Buscan ayudar a Don Efra
Fue un aficionado del equipo de Los Ángeles el que lo ubicó en su cuenta de Twitter, para hacer viral su hazaña.
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Sin embargo, Don Efra tuvo que retirarse del lugar, luego de que los gases lacrimógenos lo afectaran.
“Lamentablemente fue alcanzado por los gases y tuvo que irse a casa temprano. Mostrémosle algo de amor ayudando a la raza. ¡Cualquier ayuda!”, se lee en la publicación.
En el portal GoFundMe fue creada una página para ayudar al poblano en estos tiempos complicados de pandemia, pues cautivó a muchos internautas por su valor y ganas de trabajar, en una situación sensible y complicada.