Nacido y criado en la localidad australiana de Brisbane, Josh Lawson comenzó a actuar cuando era un niño. Consiguió su primer agente cuando tenía nueve años y empezó a tomarse la actuación más en serio hasta llegar a participar en ‘Mortal Kombat’.
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«Creo que era un niño precoz que quería ser el centro de atención, supongo», dice Lawson riendo. «Veía las películas y pensaba: ‘¡Quiero hacer eso! Creo que mis sueños eran más grandes que el pequeño pueblo del que procedía, simplemente soñaba con todas las aventuras que había visto y que parecían que todo el mundo vivía en la pantalla. Pero creo que mi madre asumió que era una fase que se me pasaría. Treinta años después, sigo haciéndolo».
A medida que Lawson crecía, se dio cuenta de que le gustaba más el aspecto de contar historias de la industria del entretenimiento. Después de terminar la escuela secundaria, se matriculó en el Instituto Nacional de Arte Dramático, donde realmente empezó a encontrar a su gente y a enamorarse más de la industria.
«Fue el momento en el que sentí que había encontrado mi banda de inadaptados», dice Lawson. «Yo era un chico de oratoria, teatro y música en el instituto y, de repente, me encontré en un lugar donde todo el mundo era ese chico. Todo el mundo era el nerd del teatro, ¡no era sólo yo! Definitivamente sentí que había encontrado a mi gente, conocí a las personas con las que quería estar el resto de mi carrera».
Lawson se siente increíblemente bendecido por haber podido labrarse una carrera como actor, y afirma que si no hubiera existido sólo una pieza del rompecabezas, podría haber tenido una vida completamente diferente por delante.
«Realmente creo que hace falta un pequeño momento para que salgas volando en una u otra dirección. Creo que hay actores increíbles por ahí que nunca conoceremos porque eligieron un camino diferente», dijo Lawson. «Tuve la suerte de tener unos padres que apoyaron mi extraño sueño y de haber entrado en la escuela, a la que entonces era muy difícil acceder, todos estos planetas se alinearon y finalmente el universo me dijo que tenía que hacerlo. Si alguna de esas cosas no hubiera ocurrido, mi vida podría haber sido muy diferente».
Lawson forma parte de la nueva película ‘Mortal Kombat’, que ya se puede ver en los cines y en HBO Max. Dirigida por Simon McQuaid y producida por James Wan (‘Aquaman’), ‘Mortal Kombat’ sigue a Cole Young (Lewis Tan), un joven luchador de artes marciales mixtas que se embarca en un viaje para desbloquear sus habilidades sobrenaturales con el fin de salvar a su familia y detener los poderes malignos del Outworld y se une a otros luchadores a lo largo de su búsqueda.
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Lawson interpreta a Kano, a quien describe como un mercenario que, en última instancia, busca ayudarse a sí mismo. Dice que Kano añade un poco de frivolidad cómica a la película, pero Lawson espera que el personaje sea uno que los espectadores amen odiar.
«Es codicioso, despiadado y ruin en cierto sentido. Su papel en la película es aportar una perspectiva un poco más humana en este mundo elevado. Está entusiasmado con la idea de conseguir superpoderes», dice Lawson. «Entra en este mundo en el que hay mucho misticismo y espiritualidad y lo socava todo el tiempo burlándose de ello y sólo intenta averiguar cómo robar la pieza de oro más cercana o conseguir su superpoder lo más rápido posible».
Aunque era un fan de la franquicia original de videojuegos «Mortal Kombat», participar en este tipo de películas no estaba inmediatamente en el radar de Lawson. Como actor, Lawson nunca pensó que estaría en una película del estilo de las artes marciales, pero le encantó poder aprender un nuevo conjunto de habilidades mientras hacía «Mortal Kombat».
«Uno reza por los retos, todo lo que quiere es hacer un montón de proyectos diferentes que te van a exigir cosas que nunca has tenido que exhibir antes, así que éste fue un gran reto. Me sumergí en él lo mejor que pude, dado el tiempo que tenía», dijo Lawson.
Al principio se sintió atraído por el proyecto porque le encantaba el juego cuando era niño, pero a medida que Lawson se adentraba en la realización de la película, le impresionó el nivel de sustancia que tenía el filme.
«Lo que me atrajo de la película fue la oportunidad, el niño pequeño que hay en mí estaba más emocionado al principio, como si pudiera estar en uno de los juegos a los que solía jugar», dijo Lawson. «Pero luego, cuando conseguí el trabajo y empecé a hablar con Simon McQuaid, al ver que todas las piezas se unían, empecé a darme cuenta de que esto era algo con más contenido de lo que pensaba en un principio. Me di cuenta de que era una película de artes marciales más que de acción, así que creo que cuanto más me adentré en la película fue cuando me entusiasmé más y más».
Lo que más sorprendió a Lawson fue que los actores del reparto no eran grandes nombres conocidos, incluido él mismo.
«Era una película que no contaba con las mayores estrellas. Si ese hubiera sido el caso, de ninguna manera habría estado en ella, no soy un nombre lo suficientemente grande», dijo Lawson. «No es habitual que una película con el presupuesto y el potencial de franquicia que tiene cuente con actores relativamente desconocidos. Muchas cosas afortunadas se pusieron en mi camino, y estoy agradecido por cómo se desarrolló».
Lawson dice que quienes vayan a ver «Mortal Kombat» pueden esperar una película con calificación R que no escatima en violencia, pero también se puede esperar que la película se mantenga fiel a su material de origen.
«Realmente se mantiene lo que el videojuego estableció, es fiel a lo que los fans esperan y aman», dijo Lawson. «Pero incluso si no sabes mucho sobre el videojuego, encontrarás una historia que, en el fondo, trata del bien contra el mal, de la superación de todas las probabilidades, para derrotar a Goliat. Tiene elementos a los que cualquiera puede agarrarse y encontrar algo en ellos».
