Las parejas de la farándula acaparan la atención de sus fans al momento de llegar al altar y sellar el amor. Pero no son pocas las que, incluso al poco tiempo, deciden decirle adiós a sus enamorados y dar por finalizada la mediática relación.
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Muchos suelen despedirse de una forma cordial y amigable, pero otros se enfilan en una batalla legal cuya duración es proporcional a la fortuna y a la cantidad de bienes y propiedades que deban repartirse. Este tema también acapara la atención de los medios que siguen cada paso hasta el desenlace.
Basta que se acabe el amor para que comiencen las acusaciones, las peleas y las discusiones por el dinero. Algunos se mantiene en juicios que pueden tardar años, tales como el de la famosa pareja de famosos, Angelina Jolie y Brad Pitt.
En el primer divorcio del actor con su la estrella de Friends, Jennifer Aniston, no hubo discusiones por el tema del dinero ni reparticiones que postergaran la sorpresiva separación. Pero su segundo matrimonio con Jolie acabó con una pelea legal que ha dado mucho de qué hablar.
Los actores no solo acudieron a los tribunales por la custodia de sus seis hijos sino que también buscaban decidir sobre los 400 millones de dólares que se establecieron en el acuerdo prenupcial. Ambos alegaron diferencias irreconciliables en su separación.
Mel Gibson ha tenido una vida sentimental tan polémica como su personalidad. El actor estivo 30 años casada con la exenfermera dental Robyn Moore, madre de sus siete hijos. Fue ella quien solicitó la separación legal de la estrella ante un tribunal que le cedió la mitad de la fortuna de Gibson.
La exesposa del actor se quedaría entonces con casi 500 millones de dólares siendo considerado uno de los divorcios más costosos de Hollywood. El actor se ha dado una nueva oportunidad en el amor y desde 2014 mantiene una relación con Rosalind Ross, 34 años menor.
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El exBeatle, Paul McCartney retomó su vida personal tras la muerte de su primera esposa por cáncer de mama. Fue entonces cuando decidió casarse con la modelo Heather Mills con quien tuvo una hija.
El amor les duró solo cuatro años. Así iniciaron lo que pareció ser una separación amigable pero al tiempo iniciaron las diferencias tras un reclamo de al menos 250 millones de dólares por parte de la exmodelo. Tras una dura batalla legal, la mujer recibió 50 millones de dólares.
Madonna y Guy Ritchie
Todos recordamos la mediática relación de la «reina del pop», Madonna, con el director británico Guy Ritchie. Todo parecía ir viento en pompa entre ambos cuando comenzaron las diferencias que llevaron a la mediática separación.
El cineasta habría pedido el divorcio a la eterna «Material Girl», en una acuerdo secreto del que destacó la indemnización de la cantante a su expareja, por un monto aproximado de 76 millones de dólares. En sus ocho años de matrimonio, ambos se convirtieron en padres de Rocco Ritchie.
Nicola Kidman y Tom Cruise conformaron una de las parejas más admiradas de la farándula estadounidense. Ambos confirmaron el romance tras el rodaje de Días de trueno y se casaron sin anunciarlo a la prensa. 11 años después, su divorcio ocurrió con el mismo hermetismo.
La cienciología fue el detonante de la separación, ya que Kidman no coincidía con el culto de su esposo. En el divorcio, el actor solo pidió que sus hijos se unieran a la creencia el actor pero su exesposa negó tan aspiración. Cruise además debió indemnizar a Kidman con cerca de 200 millones de dólares, según Showbiz.
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