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Tras la llegada de su primer varón, la esposa del rapero Kanye Wst ganó 23 kilos y medio (52 libras), los cuales podrían haber aumentado en los últimos días del embarazo, pues en aquel momento aseguró que cada vez tenía más antojos por comida chatarra.
A casi 4 meses de haber dado a luz a su hijo Saint, la protagonista de «Keeping Up with the Kardashians» ya había bajado 20 kilos (44 libras). ¿Cuál fue su secreto?
Según la nutrióloga Colett Heimowitz, Kim agrega proteínas a cada uno de sus platillos para mantenerla satisfecha. Además de alimentos que tienen un alto contenido en fibra o grasas naturales como el aguacate y aceite de oliva.
Un alimento que no puede faltar en su dieta es el queso, además no consume alimentos bajos en calorías. «Una dieta de bajas calorías te deja hambriento todo el tiempo, y necesitas no tener hambre para alcanzar el éxito (…) Cuando tienes las calorías necesarias, proteínas, grasas, y carbohidratos altos en fibra, no estarás tentado a agregarle algo más. En otras palabras, no necesitas cortar las calorías de manera drástica para perder peso,», explicó la creadora de esta dieta sin carbohidratos.
Otro de los secretos para perder peso es «volver al pasado», la madre de dos pequeños recurre a su historial fotográfico para inspirarse: «Miro fotos y pienso: si lo logré entonces, lo haré ahora».
Gracias a esta motivación, la estrella televisiva sigue sorprendiendo con sus apariciones, esta vez salió a la calle con un outfit que muy pocas se atreverían a usar, con una camiseta blanca, un short para ejercitarse, una chamarra de mezclilla y unas zapatillas de correas delgadas y transparentes.
En la galería de fotos podrán ver el cambio en su silueta foto por foto.