La división de peso supermosca vivirá una guerra en el cuadrilátero, cuando Juan Francisco Estrada y Román «Chocolatito» González se planten en el ring.
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El American Airlines Center de Dallas, Texas, alojará una de las peleas más importantes del año; de hecho, pese a la pandemia por coronavirus, el inmueble contará con la asistencia de cinco mil personas.
Esta será la segunda ocasión que se vean las caras, pero el ingrediente ahora será la unificación de los títulos de su división.
Hace ocho años, “Gallito” Estrada enfrentó a “Chocolatito” en otro escenario, pues su carrera estaba en pleno ascenso, mientras que el nicaragüense ya estaba formando una leyenda.
«Chocalito» y «Gallito» protagonizarán una guerra en el ring, por la unificación de la división supermosca
Sin embargo, el mexicano vendió cara la derrota, aprendió de sus errores y hoy tiene la oportunidad de cobrar revancha, con un botín que lo convertiría en el rey de su categoría.
La diferencia de edades es de tres años, por lo que el azteca puede sacar ventaja de ello, además, Estrada ha madurado en todos aspectos, al grado de estar viviendo su mejor momento como pugilista profesional.
“Soy más fuerte y tengo más ganas que la primera pelea. Ambos somos campeones y vamos a querer ganar esta pelea. En el primer combate yo tenía 22 años y no tenía experiencia en grandes peleas internacionales, él era un libra por libra estelar en ese momento, pero creo que esta vez me favorece.
Esta contienda tiene mucho que cumplir, pensando en que hace algunas semanas Óscar Valdez y Miguel Berchelt ofrecieron uno de los duelos más destacados del año.
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Incluso, “Chocalito” dejó claro que su pelea ante el “Gallito” paralizará a México y Nicaragua, pues ninguno saldrá a especular.
«Chocolatito» quiere sueña con obtener el título supermosca del CMB
Román tiene entre sus prioridades hacerse del cincho que tiene Estrada, es decir el título supermosca del Consejo Mundial de Boxeo, por lo que espera obtenerlo y así ser quien domine su categoría.
“Hice casi toda mi carrera en México y para mí es un orgullo pelear con los mejores, que son los mexicanos, fuertes, aguerridos; lo importante es cómo uno en la vida, cómo en cada pelea mira uno a su rival y yo nunca he visto a mi rival como mi enemigo.
A lo largo de su carrera, Román González ha sido un coco para los peleadores mexicanos; incluso, suma 20 victorias sobre los pugilistas azteca.
Dentro de esos combates, el “Chocolatito” tiene 10 nocauts técnicos, cuatro fulminantes y seis duelos que se fueron a la decisión de los jueces.
Pudo ser el nuevo Maradona
Algo que pocos saben, es que Román González pudo dedicarse al fútbol profesional, ya que era una de sus más grandes pasiones cuando era niño.
Sin embargo, a su papá no le gustó mucho la idea de que jugara al soccer, por lo que el nicaragüense enfocó su desarrollo en el deporte de los guantes.
“Me gustaba mucho el fútbol. Me encantaba. Siempre decía que era un Pelé o un Maradona. Jugaba muy bien, pero a mi papá no le gustaba eso, iba a escondida. Y cuando mi papá me miraba me regañaba y me decía ‘Eso no es para vos, es el boxeo’.
