Los Mavericks de Dallas están envueltos en la polémica, luego de que el dueño de la franquicia, Mark Cuban, tomó la decisión de que no se tocará el himno de Estados Unidos en sus juegos de local.
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El conjunto de Dallas acumula hasta ahora 10 encuentros en casa, pero en ninguno de ellos han estado presentes sus aficionados, gracias a la pandemia por coronavirus que padece todo el mundo.
No se tocará más el Himno en los partidos como local de Mavericks
Pero hace algunos días, cuando vencieron a Minnesota por 127-122, por primera vez en la temporada, los Mavericks contaron con su afición después de mucho tiempo.
Los directivos permitieron el acceso a poco más de mil 500 personas, en especifico trabajadores esenciales que ya fueron vacunados contra el COVID-19.
Desde el arranque del torneo, Dallas optó por no entonar el himno, en gran medida por los problemas que se han vivido en los últimos años.
Y es que, varios jugadores han aprovechado el momento en que se escuchan las estrofas para manifestarse.
De hecho, así nació el movimiento “Black Lives Matter”, con LeBron James a la cabeza, quien durante los actos protocolarios decidió poner una rodilla en el piso.
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Incluso, Colin Kaepernick gestó uno de los momentos más polémicos en la historia del deporte estadounidense, cuando, en 2016, decidió manifestarse en el duelo que enfrentó a los 49ers de San Francisco ante los Empacadores de Green Bay.
La idea de Cuban es evitar todo este tipo de situaciones, para que no exista una lucha de intereses en la NBA.
“Las políticas relacionadas con el Himno se han descontrolado en Estados Unidos. Si te quieres quejar, quéjate con tu jefe y pregúntale por qué él no pone el Himno todos los días cuando empiezas a trabajar”, sentenció.
Esta no es la primera ocasión en la que los Mavericks de Dallas tienen este tipo de actitudes; de hecho, desde 1980 hasta 1996 preferían reproducir la melodía “God Bless America”.
