La lluvia de ideas es una de las prácticas más comunes y tradicionales utilizadas desde décadas atrás para encontrar mediante las opiniones en voz alta de un grupo de trabajo, una serie de ideas que puedan favorecer a encontrar diversos resultados u objetivos finales trazados para una determinada campaña.
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Sin embargo, en los últimos años el brainwriting se convirtió en una de las alternativas más implementadas en todo el mundo para potenciar la creatividad y desarrollar mejores resultados. Aunque está muy de moda en varias localidades de Norteamérica y Europa, esta técnica de creatividad fue diseñada en 1969 por el experto en marketing, Bernd Rohrbach.
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6-3-5
El objetivo principal de Rohrbach fue determinar una metodología de creatividad ordenada, democrática y efectiva. La finalidad de la escritura de ideas es crear un espacio para que todas se compartan y todas las personas puedan aportar mediante textos, visiones innovadoras de manera eficaz.

Conocida también como la técnica 6-3-5, ésta puede generar múltiples beneficios si se instaura de forma adecuada, entre ellas, elegir un moderador que es la persona encargada de dirigir cada uno de los pasos durante el proceso de creación de ideas de los equipos.
Según una investigación publicada por Procedia, Social and Behavioral Sciences, estas son alguno de los beneficios que se pueden encontrar poniendo en práctica el brainwriting, llamada también la técnica 6-3-5:
- Evita los bloqueos.
- Reduce el conformismo social.
- Disminuye los conflictos interpersonales.
- Impide que la generación de ideas se desvíe del tema central.
- Desactiva o evita las diferencias de estatus entre los empleados.
- Deja de existir la clásica presión de ajustarse al grupo o de pensar todos lo mismo para no ser juzgados.
- Favorece el sentido de pertenencia al equipo.
- Potencia el procesamiento de las ideas compartidas.
- Es una técnica muy ordenada que nos evita perder tiempo.