Para poder aumentar la masa muscular hay que someternos a un entrenamiento de fuerza, que consiste en levantar pesas y utilizar otras máquinas de gimnasio que se enfocan en entrenar diferentes zonas del cuerpo.
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Este entrenamiento es practicado tanto por hombres como por mujeres, y al igual que en cualquier otra actividad física, trae consigo otros beneficios más allá de lo estético.
Se ha comprobado que el entrenamiento de fuerza reduce la ansiedad y la depresión, además de que previene el envejecimiento prematuro y la inmovilidad en edades avanzadas.
¿Cuántos días hay que dedicarle al entrenamiento de fuerza para aumentar la masa muscular?
La respuesta a esta pregunta varía mucho, ya que depende de diferentes factores, como el tipo de entrenamiento, la alimentación, el descanso y las obligaciones diarias en el trabajo y el hogar.
Realizar un entrenamiento de fuerza de 1 a 3 veces a la semana está muy bien, y si puedes entrenar más días conseguirás mejores resultados en menor tiempo, siempre y cuando no te excedas.
Lo importante es ser constantes y ejercitarse regularmente, sin descuidar la alimentación y los tiempos de descanso, sobre todo a la hora de dormir, pues se recomienda tener entre 6 y 8 horas de sueño continuo.
El científico deportivo John McLester expuso que, si se entrena por lo menos tres veces a la semana, se consigue una ganancia muscular del 62%, y resalta que es mejor la práctica regular que hacer esfuerzos aislados y excesivos.
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Con respecto a conseguir hipertrofia muscular, el sitio web Men’s Health sugiere que ejercitar varios grupos musculares 2 o 3 veces a la semana, y siendo constantes, se obtendrán muy buenos resultados con una buena rutina.
Se recomienda tomar al menos un día de descanso a la semana para que el cuerpo pueda recuperarse por completo, y realizar de 3 a 12 series por sesión, dependiendo de la intensidad de los ejercicios y de cuantos músculos se trabaje.
Cuando se presenten días de fatiga, lo mejor que se puede hacer es acortar la sesión de entrenamiento, asimismo, recuerda pedir consejos de profesionales para armar una rutina conforme a tus necesidades y posibilidades.
