En un dramático episodio en California, dos valientes empleados de un 7-Eleven tomaron la justicia en sus propias manos y frustraron un intento de robo, defendiendo el establecimiento y sus productos con una táctica sorprendente. El ladrón, quien intentaba llevarse un bote de basura lleno de cigarrillos, no contaba con la feroz reacción de los trabajadores, quienes emplearon palos para detener al delincuente.
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El impactante video del incidente muestra a uno de los empleados sosteniendo al ladrón en el suelo, mientras su colega lo golpea implacablemente aproximadamente 25 veces con un palo. A pesar de las súplicas del ladrón, los trabajadores no cedieron hasta que el hombre se rindió por completo.
Increíble video en el que unos trabajadores arremeten contra un ladrón
El robo comenzó de manera descarada, con el ladrón casualmente saqueando el área detrás del mostrador del supermercado en California, llenando un bote de basura de 20 galones con cigarrillos, tabacos y vapes. Los trabajadores, quienes se encontraban fuera de cámara, intentaron persuadirlo para que detuviera el robo, pero el ladrón continuó con su acto delictivo.
Fue entonces cuando uno de los empleados decidió actuar y confrontó al ladrón, llevándolo al suelo antes de que su compañero se uniera a la lucha con un palo en la mano. Con precisión y determinación, el empleado propinó una serie de golpes al ladrón, mientras este gritaba pidiendo misericordia.
El video muestra claramente el enojo y la frustración de los trabajadores, quienes habrían tenido suficiente de la creciente ola de robos organizados que ha afectado a comercios en todo Estados Unidos. La escena refleja la desesperación de los pequeños negocios que enfrentan pérdidas significativas debido a robos recurrentes y la aparente falta de acción por parte de las autoridades.
Evitaron un robo y generaron gran polémica
La brutalidad del enfrentamiento ha generado un debate sobre si la respuesta de los empleados fue excesiva o justificada en defensa de su lugar de trabajo y los bienes que estaban siendo robados. Por un lado, algunos usuarios argumentan que los trabajadores actuaron en defensa propia y protegieron su fuente de empleo y la propiedad del establecimiento.
Por otro lado, otros consideran que la violencia no es la solución y que deberían haber llamado a las autoridades para manejar la situación. Independientemente de las opiniones divergentes, este incidente refleja una preocupante realidad para muchos negocios en Estados Unidos.
