El Festival de Cine de Sarajevo estalló en indignación por la producción serbia de un drama sobre la Segunda Guerra Mundial que, según sus críticos, glorifica a las organizaciones nacionalistas serbias.
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“Héroes de Halyard”, fue realizada por el actor y director serbio Rados Bajic y transcurre en la primavera de 1944 en un remoto pueblo serbio.
La historia gira en torno a dos hermanos que luchan en bandos opuestos durante la Segunda Guerra Mundial, uno por el Partido de Izquierda y el otro por el Ejército de Derecha.
La película está basada en la historia real de una operación de rescate de pilotos estadounidenses y aliados que quedaron atrapados en territorio ocupado por los nazis, lo que actualmente es Serbia.
A pesar de su temática, la película ha generado controversia porque algunas personas creen que glorifica a organizaciones nacionalistas serbias como el Ejército Yugoslavo de la Patria, también conocido como Chetniks, reseña Variety.
Aunque se formó inicialmente para rechazar la invasión de Yugoslavia por los Aliados durante la Segunda Guerra Mundial, este grupo colaboró ocasionalmente con la Alemania nazi y la Italia fascista, cometiendo masacres raciales y otros crímenes de guerra.
La polémica se agravó cuando se proyectaron fragmentos de la película en una exposición de contenidos organizada por la empresa estatal serbia de telecomunicaciones, Telekom Srbija.
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Controversia de la cinta
El proyecto suscitó una respuesta negativa de los asistentes bosnios y desató una tormenta en las redes sociales y en la prensa local.
La concejal de Sarajevo, Benjamina Kari, exigió responsabilidades y la destitución de los encargados de incluir la película en la presentación, poniendo en peligro la cooperación entre la ciudad y el festival.
El medio estadounidense señala que los organizadores del festival respondieron alegando que desconocían la naturaleza controvertida de la película y que la inclusión de este material había dañado la confianza del público.
En respuesta a la controversia, el Festival de Cine de Sarajevo canceló casi todos sus actos, dejando únicamente un panel centrado en la representación artística y literaria de la violencia contra las mujeres.
Además, se ha declarado que las futuras presentaciones implicarán un proceso de selección más riguroso.