OnlyFans: Periodista gana miles de dólares calificando cuerpos masculinos

Conforme pasa el tiempo, cada vez son más los influencers, deportistas, exatletas y celebridades que voltean a ver a OnlyFans, como un recurso para mejorar su vida.

Y es que la plataforma se ha convertido en el boom del momento, gracias a que permite a los creadores de contenido cobrar suscripciones a sus seguidores que deseen apreciar su contenido privado.

De hecho, en el modelo de negocio de OnlyFans, los usuarios que tengan su cuenta se embolsan 80 por ciento de las ganancias de las membresías que consigan.

De esta forma, en la web se pueden conocer decenas de casos de personas que abandonan su trabajo para dedicarse al 100 por ciento a sus sesiones de videos, fotos y la promoción de su perfil en la plataforma.

Ahora se hizo viral el caso de una periodista, conocida como Leanne London, quien optó por dejar atrás las notas, crónicas y entrevistas, para entrar de lleno al portal de contenido para adultos.

Conocida como Leanne London ha tenido un éxito rotundo en la aplicación de contenido privado, al sumar más de mil 900 suscriptores.

De hecho, consiguió sumar más de tres millones de dólares en un año.

Ella ha optado por hacer una promoción “juguetona” en OnlyFans. “Nada está prohibido conmigo, puedes explorar tus fantasías más profundas y oscuras”, se lee en su perfil.

Su contenido se caracteriza por tener imágenes y videos de índole fetichista y dominador.

Pero uno de las cosas que más llama la atención es que pide a sus suscriptores que le envíen imágenes de sus penes, para darles una calificación.

La suscripción al perfil de Leanne London tiene un precio de cinco dólares al mes (100 pesos mexicanos), aunque los encuentros por videollamada alcanzan un valor de 500 dólares por cinco minutos.

Antes de enfocarse de lleno en OnlyFans, se aventuró al periodismo, al escribir en publicaciones como Woman & Home, Now Magazine y Women’s Health, aunque se dio tiempo de que ese empleo no era para ella.

“Estaba trabajando para una empresa, realmente trabajé duro para ellos, y me pagaron centavos, casi nada”, dijo