El día que Lola Beltrán predijo su muerte y le dijo adiós a sus amigos

Lola Beltrán fue una de las cantantes de regional mexicano más exitosas de su época y hasta la actualidad sigue en la memoria de muchos de fans.

Algo que sorprendió al público fue su repentina muerte, en 1996, a la edad de 64 años.

Llamó la atención que la artista ya presentía su muerte desde meses atrás, por lo que decidió despedirse de sus familiares y no esperar hasta su último día de vida.

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También conocida como “Lola, la grande”, la artista dejó un gran legado en la música ranchera.

Durante los últimos años de su vida, a la cantante se le diagnosticó una enfermedad cardíaca, que la afectó, pues tuvo que comenzar a cuidar su alimentación.

La intérprete quiso anticiparse y decidió repartir su herencia antes de morir.

Cabe resaltar que pocos conocían la situación a la que se estaba enfrentando y sólo sus amigos más cercanos estuvieron a su lado.

De acuerdo a información revelada por José Alfredo Jiménez Jr., en el programa “La historia detrás del mito”, su padre fue uno de los pocos que supieron del problema de Lola.

La intérprete hizo un último viaje a su natal Rosario, Sinaloa, donde pudo disfrutar de su último cumpleaños en compañía de sus familiares.

Pues ella ya presentía que su fin estaba cerca y quería recordar el momento.

Beltrán reunió a sus seres más queridos, con quienes fue al panteón para señalarles en dónde quería que sus restos fueran sepultados y la forma en que esperaba que su cuerpo descansara.

Luis Villegas Murguía, uno de los amigos del cantante recordó ese momento y que le dijo: “Bueno, nos vemos pronto”, a lo que ella contestó: “No, nos vamos a ver, pero en el cielo”.

Cuando volvió a CDMX, sólo pasaron unos días, pues sufrió un infarto que le quitó la vida.