El actor Ben Affleck quiere recuperar su salud emocional y física luego de un largo período atrapado en el alcoholismo. En ese empeño lo acompaña JLo, su viejo amor, con quien reinició un romance luego que ambos dejaran atrás otras relaciones.
JLo se separó del ex grandeliga Álex Rodríguez y casi inmediatamente se le vio muy acaramelada con el protagonista y director de “Argo”. Por su lado, Affleck, de 49 años, cortó su matrimonio con la también actriz Jennifer Garner, con quien tuvo tres hijos.
Justamente con Garner vivió la peor etapa como alcohólico. Sin duda, la enfermedad del actor abonó el fin del matrimonio y estuvo a punto de hacer estragos en la relación con sus hijos.
¿Discutían?
Hace poco circularon unas fotografías donde aparece Affleck conversando con su ex en un lugar abierto en California. En las gráficas, Ben hace movimientos de sus manos y mira directamente a Garner, quien cruzada de brazos y muy seria lo escucha.
Se conoció que ambos estaban en las inmediaciones del colegio de los chicos y que revisaron unos documentos posiblemente relacionados con las obligaciones escolares, pero no todas las imágenes saltaron a las redes sociales.
De un vistazo, las pocas fotos publicadas sugieren que la pareja se encontraba discutiendo, pero tal parece que solo se trató de un engaño de la cámara, pues ambos conversaban amigablemente, reseñó Hola.
Como se recordará, Jennifer Garner siguió apoyando a Ben en su lucha contra el alcoholismo sin importar que ya estaban divorciados. Ella fue a visitarlo en varias ocasiones al centro de rehabilitación, lo que demostró mucho de su solidaridad y comprensión para con el actor. Desde 2020, la actriz de 49 años mantiene una relación con John Miller.
“No estoy curado”
Aunque Ben Affleck y Jennifer López parecen llevarse de lo mejor en su segunda oportunidad, lo cierto es que el actor reconoce que no está totalmente recuperado de su adicción.
Recientemente dijo en el programa de Howard Stern que “parte de la razón por la que empecé a beber es porque estaba atrapado”, publicó el medio español Antena 3. “Yo estaba en plan, ‘no puedo irme por mis hijos, pero no soy feliz, ¿qué hago?’. Y lo que hice fue que me bebí una botella entera de whiskey y me quedé dormido en el sofá, que resultó no ser la solución” reveló.
Admitió que más allá del respeto que sentía por Garner, la vida en pareja no fue perfecta y, simplemente, debían separarse. “Teníamos un matrimonio que no funcionaba. Estas cosas pasan. Ella es alguien que quiero y respeto, pero con quien no debería seguir casado”. Luego explicó que a pesar de los obstáculos se logró una separación amigable.
“Lo hicimos lo mejor que pudimos. ¿Tuvimos momentos de tensión? ¿Tuvimos desacuerdos por la custodia? ¿Fue difícil para nosotros? ¿Nos enfadamos? Sí, pero fundamentalmente siempre se sostuvo con respeto. Yo sabía que era una buena madre, y esperaba que ella pensara lo mismo de mí (…) Si me hubiera quedado, probablemente aún estaría bebiendo”, confesó.
Al ser consultado sobre su adicción reconoció que no está curado. “La cura para la adicción es sufrir, sufres lo suficiente como para que algo dentro de ti diga, ‘se acabó’. Soy afortunado porque llegué a ese punto antes de perder lo más importante. No mi carrera o dinero, mi relación con mis hijos (…) No estoy curado, pero no he querido beber ni una vez”, afirmó.
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