Olivier Giroud se convirtió en la figura de la Jornada 8 de la Serie A, pero no porque el delantero haya anotado goles. Y es que, en el encuentro que enfrentó al AC Milán y Genoa, el delantero galo tuvo que ponerse de portero, tras la expulsión de Mike Maignan.
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En los últimos minutos del encuentro, el Estadi Luigi Ferraris presenció uno de los momentos más importantes de la temporada. Cuando corría el minuto 101, el entrenador Stefano Pioli se quedó sin cambios, por lo que no pudo ingresar a otro guardameta.
Giroud y su nueva faceta en el campo
Ante esta situación, Giroud tomó los guantes y se puso la playera de portero, pues su equipo necesitaba que un futbolista del campo se colocó bajo los tres postes.
Cuando la meta del Milán se vio en aprietos, por un ataque de George Puscas, Olivier se tuvo que emplear al máximo y se aventó a un balón que quedó dividido, sin imaginar que sería el héroe de su equipo, ya que evitó que la pelota perforara su arco.
Segundos más tarde, el árbitro central decretó el final del encuentro, con el portero francés como el héroe de la noche, sin imaginar que sería figura por convertirse en un arquero improvisado.
Milán venderá su playera de portero
La afición del Milán quedó fascinada con la reacción del galo, por lo que en redes sociales recibió muchos halagos por su valentía. Tal fue la euforia, que el AC Milán ya puso a la venta la indumentaria de portero con su nombre y el número 9.
En el sitio web del conjunto italiano, ya aparece la opción de comprar este jersey, que enmarca un momento único en la carrera del delantero.
La Serie A le hizo un pequeño homenaje, pues decidieron incluirlo en el 11 de la jornada, como el guardameta más destacado de la semana.
