Cruz Azul está viviendo uno de los peores torneos de los últimos años, al sumar sólo tres victorias en el actual campeonato.
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La mala racha que llevaba La Máquina obligó a la directiva a hacer cambio de director técnico, por lo Ricardo Ferretti tomó las riendas del equipo.
Rodolfo Rotondi, el jugador celeste que pudo ser doctor
Sin embargo, el efecto “Tuca” aún no llega a la institución, motivo por el que se mantienen trabajando a tope para intentar llegar al puesto 12 de la tabla general, y así clasificar a Liguilla en el repechaje.
Pese al mal momento que atraviesan los celestes, algunos jugadores han dado la cara por el equipo; tal es el caso de Rodolfo Rotondi, quien llegó a la institución la temporada anterior.
En ocho duelos disputados, el atacante acumula un tanto, pero su aporte por la banda derecha le ha traído bueno a dividendos a los celestes.
Incluso, el argentino es parte del 11 estelar de Ferretti, al ser considerado un elemento con mucho recorrido en el terreno de juego.
Aunque atraviesa un momento complejo con el cuadro celeste, Rotondi está acostumbrado a ir contracorriente.
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El mediocampista sufrió por ser estelar en Primera División
Cuando inició su camino en el balompié profesional, Rodolfo tuvo momentos de desesperación, pues no conseguía consolidarse con el Newell’s Old Boys, situación que lo orilló a buscar acomodo en la Segunda División de Chile.
Estando ahí, el mediocampista se replanteó su futuro y creyó que lo mejor era estudiar la universidad, al no ver un camino claro en el que el balompié lo sacara adelante.
“Eso fue difícil, algo que en realidad me costó. Tuve momentos muy malos y feos. Estuve a punto de optar por otra cosa. Es ahí donde yo digo que están los familiares y los amigos, son unos pilares.
“Yo estudiaba Medicina, que es una carrera muy complicada y más porque al mismo tiempo estaba con el fútbol. Era algo muy difícil. Si me iba bien, iba a seguir con el deporte. Si me iba mal, iba a retomar los estudios”, relató a Récord.
Pero el sudamericano tuvo una buena temporada en la Segunda División de Chile, situación que lo catapultó al Máximo Circuito, al ser contratado por el Santiago Wanderers.
