Deportes

Así consiguió transformar su físico Erling Haaland para ser un súper goleador

El delantero noruego del Manchester City, Erling Haaland, ya suma 26 goles en la Premier League, en 23 partidos disputados.

El noruego es una máquina de hacer goles.
Erling Haaland. El noruego es una máquina de hacer goles. (Twitter)

Erling Haaland está teniendo una temporada espectacular con el Manchester City, al sumar 26 goles en 23 partidos disputados de la Premier League, rompiendo todos los récords que se atraviesan en su camino.

PUBLICIDAD

Al finalizar la temporada pasada, el conjunto inglés anunció la contratación del noruego, por lo que los fans quedaron ilusionados con su llegada.

Haaland, el delantero de moda en la Premier League

Haaland le costó 60 millones de euros al City, una cantidad por debajo de lo que ha mostrado el atacante desde sus primeros minutos en el campo.

Hasta ahora, el rendimiento del delantero ha sido superlativo, pues ya suma 32 anotaciones en 30 partidos con la camiseta de los Ciudadanos.

Pero este olfato goleador se debe al gran físico con el que cuenta, así como la habilidad para marcar pese a su estatura.

Y es que, Erling no es un delantero cualquiera, ya que tiene una altura 1.94 metros, pero su capacidad con el balón no es limitada por ello.

Antes era muy flaco

Uno de los momentos más importantes en su carrera llegó cuando era parte del Molde FK, equipo de la Primera División de Noruega.

PUBLICIDAD

Ahí, Haaland conoció a Borre Steenslid, entrenador y preparador físico, quien fue parte fundamental para la transformación.

Y es que, aunque Erling tenía buena estatura, era un jugador delgado, que perdía con facilidad la esférica en el uno contra uno.

Pero su exentrenador vio muchas cualidades en él, por ello lo puso a trabajar en su físico, hasta convertirlo en una máquina imparable de hacer goles.

El delantero subió más de 12 kilos y se ganó un lugar estelar en el club, situación lo ayudó a dar el brinco a otro club más importante de Europa.

“Realmente, tuvimos que reiniciarlo; le construimos una musculatura desde cero. Su plato era literalmente una montaña llena de comida. Le diseñé un circuito donde en una de las estaciones tenía que golpear un saco y, un día, le partió por la mitad uno de ellos”, relató Borre.

PUBLICIDAD

Tags


Lo Último