El Libro Guinness de récords mundiales ha tenido en su haber diversos deportistas, que se han ganado una mención por alguna habilidad.
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Tal es el caso del joven y excanterano del Real Madrid de básquetbol, Olivier Rioux, quien se unió al famoso manual, por convertirse en el adolescente más alto del mundo en la actualidad.
Y es que el canadiense ha alcanzado los 226.7 centímetros de altura, pese a tan sólo tener 15 años de edad.
De hecho, Olivier podría establecer todavía otro récord, pues le quedan unos años más de desarrollo, en los que alcanzaría un poco más de tamaño.
Las comparaciones llegaron a las redes sociales, ya que sólo cinco jugadores en la NBA han tenido una altura similar: Gheorghe Muresan, Manute Bol, Yao Ming, Slavko Vranes y Shawn Bradley.
El adolescente comenzó su carrera en el básquetbol a los cinco años, saltando a la fama gracias al torneo de La Roda 2018, en el que fue parte del conjunto galo Frenchy Phenoms.
En ese entonces, Rioux media cerca de 2.13 cm, por lo que llamó la atención de diversos medios, al tratarse de un niño de 12 años.
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Tras ese campeonato, el Real Madrid se fijó en su talento y lo incorporó al equipo, para poder ver su desarrollo día con día. Incluso, representó al cuadro blanco en el Torneo Castelldefels Sub 13.
Sin embargo, Olivier quiere triunfar en la NBA, motivo por el que se mudó a Estados Unidos, para ser parte del IMG Academy, en Florida.
Incluso, el campeonato estadounidense ya lo tiene en la mira, pues lo siguen desde el torneo de La Roda, ya que ahí fue donde se hizo viral en redes sociales.
Aunque vivió en Europa, Olivier ya fue parte de la Selección de Canadá en algunos torneos, al grado de representar al conjunto Sub 16, en donde destacó por su estatura.
Tal ha sido su fama, que cuando se fue de vacaciones a Cuba, muchas personas hicieron fila para tomarse fotos con él, pues su tamaño es algo que impresiona a primera vista.
La estatura es algo que heredó Rioux, pues su familia también es así de alta. Por ejemplo, su papá mide 2.07 cm, mientras que su madre suma 1.85.
Estar en el Libro Guinness de records es un motivo de orgullo, pero el adolescente no pierde la fe de un día ser parte de la NBA, pues quiere seguir los pasos de su ídolo LeBron James.