Los Pumas de la UNAM lograron lo imposible en las últimas semanas. Y es que los universitarios pasaron de ser uno de los peores de la Liga, a estar instaurados en los Cuartos de Final de la Liga MX.
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Andrés Lillini supo sacar del bache a su equipo, por lo que hoy están en la Fiesta Grande, preparados para enfrentar al América, en uno de los duelos más destacados de esta llave.
Pumas ha sufrido varias bajas en los últimos semestres, ya que la institución está sumergida en una crisis monetaria.
Sin embargo, Lillini ha encontrado jugadores destacados, que han dado la cara por el equipo en los momentos más grises.
Uno de ellos es Arturo Ortiz, defensor central que llegó a Pumas para sustituir a Johan Vásquez, quien se encaminó en un nuevo desafío en su carrera al irse al Genoa de la Serie A.
Arturo arribó a CU como un completo desconocido, al tratarse de un futbolista con poco cartel en el balompié azteca.
Pero Ortiz ya tiene sus años en el fútbol mexicano. Incluso, su recorrido había sido más en la Liga de Expansión, en donde perteneció a clubes como Leones Negros, Correcaminos, Mineros de Zacatecas y Pumas Morelos, entre otros.
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Con la salida de Vásquez, el timonel auriazul se dio a la tarea de buscar un sustituto, sin imaginar que en la filial habría un tipo experimentado, que tenía el hambre de triunfo como su principal arma.
“Palermo”, apodo que se ganó en honor al exdelantero de Boca Juniors, aprendió de grandes maestros en sus inicios, principalmente de Rafael Márquez, con quien compartió vestidor en León.
Este torneo ha sido uno de los mejores en su carrera, ya que es pieza fundamental para que los de CU estén instaurados en los Cuartos de Final, pues junto a Nicolás Freire ha hecho una de las duplas más solidas del campeonato.
“Cuando jugué en Celaya un entrenador uruguayo, yo era de cabello chino, me encontró parecido con Martín Palermo. Luego me fui al León y el ‘Gallito’ Vázquez jugó conmigo en Celaya, entonces cuando subo a Primera División me empezó a decir así. Luego en Copa metí gol y en el periódico en lugar de mi nombre salió ‘Palermo’ Ortiz y ya se me quedó.
“Esta es la oportunidad, no hay otra. Pensé que este era el último tren que podía tomar y no va a quedar duda de que estoy preparado para estar aquí. Por algo pasan las cosas y a mis 29 años voy a dar el máximo porque me siento en mi mejor momento. Es un jugador muy importante tanto a nivel mexicano como en Europa, es un jugador muy reconocido. Yo lo admirsiempre fue una imagen para mí y al tenerlo de compañero a Rafa tuve mucho qué aprenderle”.
— Arturo Ortíz, defensor de los Pumas de la UNAM